Llevo en mis oídos

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Llevo en mis oídos

Llevo en mis oídos

Llevo en mis oídos todos los sonidos,
músicas del pueblo, sus silencios y sus ruidos.
Llevo en mis oídos calma y estallidos,
voces y susurros y regresos prometidos.

Llevo en mis oídos lo escuchable y permitido.
Llevo en mis oídos los suspiros prohibidos.
Llevo en mis oídos, claros y encendidos,
todos los latidos que me dió tu corazón.

Llevo en mis oídos todos los sonidos,
pésames y avisos desalmados de despido.
Llevo en mis oídos cantos de los nidos,
fiesta por la vuelta de los que se habían ido.

Llevo en mis oídos palmas, risas y rugidos,
como también llevo los aplausos y el silbido.
Llevo en mis oídos todo lo vivido…
Más algún secreto que un vecino me contó.

Oh... Oh... Oh...
Para palabras de honor, para tu frase de amor, llevo en mis oídos el audífono mejor
y para los vozarrones de cobardes y matones, llevo en mis oídos bien hundidos dos tapones.

Llevo en mis oídos todos los sonidos,
y el orgullo de sentir que no nos han vencido.
Llevo en mis oídos, truco y falta envido
y fuera del juego, todo lo que me han mentido.

Llevo en mis oídos en CD, cassette, vinilo,
demasiadas grabaciones de Estados Unidos.
Llevo en mis oídos un lugar vacío,
listo para oír lo que me quieras cantar vos.

Oh... Oh... Oh... Para palabras de honor......

Llevo en mis oídos todos los sonidos,
canto de sirena y llanto del tendal de heridos.
Llevo en mis oídos más de lo que pido,
gritos de la moda y coros mansos del olvido.

Llevo en mis oídos la promesa y los pedidos,
como también llevo el verso desagradecido.
Llevo en mis oídos todo lo que he sido
No muy parecido a lo que mi viejo soñó.

Oh... Oh... Oh... Para palabras de honor......

Llevo en mis oídos todos los sonidos, graves vibraciones y agudísimos zumbidos.
Llevo en mis oídos nombres y apellidos de mis 30.000 hermanos desaparecidos.
Llevo en mis oídos las excusas del vendido, y para los días en que vengo confundido.
Llevo en mis oídos la oración de un niño, el final del himno y un discurso de Perón.

2

El Clarín

El Clarín

El clarín es un simple instrumento,
algo más que una torpe corneta.
Musical artefacto de viento
que oís un momento y después te atormenta.

El clarín era un cuerno de caza
pero no de cualquier cornamenta,
era el asta de bueyes de raza,
que por donde pasan, el miedo acrecientan.

El clarín no combina armonías,
suena igual si lo sopla su dueño,
o su tropa, o su cofradía y peor todavía, si sopla un ingenuo.

Quiero que suene el clarín, su alarido, su aullido y su queja.
Que lo sufra quien lo quiera oír, yo prefiero al clarín bien lejos de mi oreja.
Quiero que suene el clarín... De una vez.

El clarín desde tiempos de antaño
fue forjado en diversos metales,
por lo tanto con menos tamaño,
logró hacer más daño, a más animales.

El clarín de esa forma atraviesa,
por más campos que en la cacería.
Tempranísimo anuncia que empiezan
batallas que apestan y arruinan el día.

El clarín de por sí es mentiroso,
a lo lejos parece trompeta,
al mirarlo de cerca es tan soso y su tono filoso, el alma te agrieta.

Quiero que suene el clarín, su alarido, su aullido y su queja.
Que lo sufra quien lo quiera oír, yo prefiero al clarín bien lejos de mi oreja.
Quiero que suene el clarín... De una vez.

El clarín nunca habrá de escucharse
musicando un adiós ni un regreso,
ni en los sueños, ni en los despertares,
ni en cielos, ni en mares, ni en risas, ni en besos..

El clarín no posee una tecla
que acaricie el calor de una mano,
ni el vibrar de una fiesta entre cuerdas,
que se alce y se pierda en la fuerza de un piano.

El clarín siempre estuvo asociado
al llamado de la hora más cruel.
Canta mal si es de bronce dorado,
de hueso o armado de tinta y papel.

3

Videla Perdiste

Videla Perdiste

Hoy fui a caminar por las callecitas de mi barrio
con mi chica de la mano y los dos sin documentos... VIDELA PERDISTE

Iba haciendo cuentas de los cuentos que no cuentan en los diarios
pero que es tan necesario ir a contar, con argumentos de verdad,
como el aumento sideral de la matrícula escolar y el matrimonio igualitario... VIDELA PERDISTE

Perdiste en mi barrio que se te dio vuelta como una tortilla...
Perdiste en la villa, que está organizando el cómo y el cuándo salir de la orilla... VIDELA PERDISTE

Perdiste en el Congreso que está abierto y no desierto como lo tenías vos,
para que se oiga la voz , del de este lado y del de enfrente,
del que piensa diferente y del que piensa igual que yo,
o parecido, o lo contrario,
sin repetir lo que le canten por la tele y por la radio...
VIDELA PERDISTE... Por penales... a pesar de laberintos judiciales.
VIDELA PERDISTE... Por goleada... por la fe y la identidad recuperada.

Perdiste el honor y pudriste la tierra, Perdiste la guerra que nunca existió.
No estás ni a la altura de un hijo de perra, porque cualquier perro es más digno que vos

Todo lo que el pueblo le pedía a Dios
Está llegando y no por obra del destino,
ni por el viento, ni por un rayo divino,
es porque el pueblo su camino ya eligió.

Todo lo que el pueblo le pedía a Dios,
ya no se pide, lo construye el pueblo mismo.
Organizándose y venciendo al egoísmo,
Con más trabajo, más cultura y más amor.

Hoy fuí a caminar... por el tan temido conurbano,
y el terreno abandonado de basura y matorral se ha transformado (en qué) en parque industrial.
VIDELA PERDISTE
Ví como se alzaba la cortina de una fábrica argentina
y en la esquina vi otra más... y otra a la vuelta y otra acá enfrente
y al ladito el almacén lleno de gente.
VIDELA PERDISTE
Perdiste en la pensión para mi abuela, en la salud, en las escuelas
y perdés cuando los hijos de una obrera pisan la universidad

VIDELA PERDISTE...
Perdiste en cada risa, en cada beso, en la caricia, los regresos.
VIDELA PERDISTE...
Perdiste en las canciones, los poemas, los sabores y el abrazo.
VIDELA PERDISTE...
Y tu fracaso... es señal que la justicia se abre paso.
VIDELA PERDISTE...
Y tu derrota... solamente va a llorarla a algún idiota

Perdiste al creer que algo habías ganado con toda la vida que dejaste trunca.
Más lo que creíste que habías matado está en todos lados, más vivo que nunca.

4

La clase baja

La clase baja

La clase baja no son los pobres,
tomando en cuenta que la estatura
de un grupo humano se mide sobre
sus intenciones y sus posturas.

La clase baja, más bien rastrera,
se arrastra torpe, burda, ignorante,
vendiendo el alma a su billetera,
comprando poses, modas y amantes.

Y como el odio no cuesta nada,
la clase baja carga a granel.
Lo traga todo... Ruge amargada
sin una sola gota de miel.
Y como el odio no cuesta nada,
se llena de él.

Baja, baja, baja, baja y llegarás... El desagüe está ahí nomás.

La clase baja, no es clase obrera,
nada construye hacia adelante.
Se siente noble, de gran melena
y es medio pelo, insignificante.

La clase baja, no tiene altura,
vive agachada en sus miserias.
Otros le escriben la partitura
y ella recita versos de histeria.

Y para otros, los poderosos,
la clase baja, suda y trabaja.
Los cree sabios y generosos
y de rodillas, más se rebaja.
Y de esos otros, los poderosos,
come migajas.

Baja, baja, baja, baja y llegarás... El infierno está ahí nomás.

La clase baja no es la que tiene
las más urgentes necesidades.
Precisa cosas que no se obtienen
en sus oscuras profundidades.

Y como el aire es gratis, por suerte,
la clase baja respira igual,
el aire fresco que ella no advierte
que es aire nuevo y fundamental,
para no hundirnos
sin distinción de clase social.

5

Monólogo "Té de Ceylán"

Monólogo "Té de Ceylán"

Resulta que antes no te importaba nada y ahora te importa todo. Sobre todo lo chiquito. Pasaste de náufrago a financista sin bajarte del bote.
Vos, sí, vos, que ya estabas acostumbrado a saber que tu patria era la factoría de alguien y te encontraste con que te hacían el regalo de una patria nueva, y entonces, en vez de dar las gracias por el sobretodo de vicuña, dijiste que había una pelusa en la manga y que vos no lo querías derecho sino cruzado. ¡Pero con el sobretodo te quedaste!
Entonces, ¿qué me vas a contar a mí? ¿A quién le llevás la contra? Antes no te importaba nada y ahora te importa todo. Y protestás.¿Y por qué protestás? ¡Ah, no hay té de Ceilán!.
Eso es tremendo. Mirá qué problema. Leche hay, leche sobra; tus hijos, que alguna vez miraban la nata por turno, ahora pueden irse a la escuela con la vaca puesta.¡Pero no hay té de Ceilán! Y, según vos, no se puede vivir sin té de Ceilán. Te pasaste la vida tomando mate cocido, pero ahora me planteás un problema de Estado porque no hay té de Ceilán.
Claro, ahora la flota mercante es tuya, ahora los teléfonos son tuyos, ahora los ferrocarriles son tuyos, ahora el gas es tuyo, pero…, ¡no hay té de Ceilán!
Para entrar en un movimiento de recuperación como este al que estamos asistiendo, han tenido que cambiar de sitio muchas cosas y muchas ideas;
Pero, claro, vos estás preocupado, y yo lo comprendo: porque no hay té de Ceilán. ¡Ah… ni queso!.¡No hay queso! ¡Mirá qué problema! ¿Me vas a decir a mí que no es un problema? Antes no había nada de nada, ni dinero, ni indemnización, ni amparo a la vejez, y vos no decías ni medio; vos no protestabas nunca, voste conformabas con una vida de araña. Ahora ganás bien; ahora están protegidos vos y tus hijos y tus padres. Sí; pero tenés razón: ¡no hay queso! Hay miles de escuelas nuevas, hogares de tránsito, millones y millones para comprar la sonrisa de los pobres; sí, pero, claro, ¡no hay queso! Tenés el aeropuerto, pero no tenés queso.
Mirá, la tuya es la preocupación del resentido que no puede perdonarle la patriada a los salvadores. Para alcanzar lo que se está alcanzando hubo que resistir y que vencer las más crueles penitencias del extranjero y los más ingratos sabotajes a este momento de lucha y de felicidad. Porque vos estás ganando una guerra. Y la estás ganando mientras vas al cine, comés cuatro veces al día y sentís el ruido alegre y rendidor que hace el metabolismo de todos los tuyos. Porque es la primera vez que la guerra la hacen cincuenta personas mientras dieciséis millones duermen tranquilas porque tienen trabajo y encuentran respeto. Cuando las colas se formaban no para tomar un ómnibus o comprar un pollo o depositar en la caja de ahorro, como ahora,sino para pedir angustiosamente un pedazo de carne en aquella vergonzante olla popular, o un empleo en una agencia de colocaciones que nunca lo daba, entonces vos veías pasar el desfile de los desesperados y no se te movía un pelo, no. Es ahora cuando te parás a mirar el desfile de tus hermanos que se ríen, que están contentos… pero eso no te alegra porque, para que ellos alcanzaran esa felicidad.
No importa que tu patria haya tenido problemas de gigantes, y que esos problemas los hayan resuelto personas. Vos seguís con el problema chiquito, vos seguís buscándole la hipotenusa al teorema de la cucaracha, ¡vos, el mismo que está preocupado porque no puede tomar té de Ceilán! Y durante toda tu vida tomaste mate!
¿Y a quién se la querás contar? ¿A mí, que tengo esta memoria de elefante?. ¡No, a mí no me la vas a contar!".

6

Té de ceylán

Té de ceylán

Tengo hermanos, tengo amigos,
tengo sueldo, tengo abrigo
y donde ayer había un baldío asqueroso
tengo casa, tengo nido,
mis sillones preferidos,
tengo luz y ya no saco agua de un pozo.

Tengo el calefón prendido
y en el freezer tengo kilos
de alimentos que mañana van al horno
y un equipo de sonido
que te parte los oídos,
tengo LED y la TV quedó de adorno.

Pero me falta algo esencial, en este infierno, sin libertad.
Con el gobierno, tá todo mal...

Me controlan y me asfixian... Me reprimen y me quitan
la oportunidad divina... de gozar de una delicia sin igual...
Porque ya no hay Té de Ceylán.

Té de Ceylán ... Té de Ceylán
Lo frenaron en la aduana con la colcha de mi hermana
que una esclava le cosió allá en Taiwán...
Y acá ya no hay té de Ceylán.

Tengo coche y bicicleta,
tengo resto en la tarjeta
y mi mujer se hizo las... gafas con aumento.
Pero para hacer dos leguas
por la culpa de una yegua,
tengo media hora de embotellamiento.

Tengo chicos en la escuela,
jubilada está mi abuela
y por fin me hice una buena dentadura...
Puedo hablar de lo que quiera
y este finde viajo afuera
pero igual me siento en una dictadura.

Porque me falta algo esencial... y no es azúcar, pimienta y sal.
Y aunque me cumpla la obra social

Falta algo indispensable... y el Estado es responsable
si a las cinco de la tarde... no disfruto de un placer tan especial...
Porque ya no hay té de Ceylán.

Té de Ceylán... Té de Ceylán...

7

Cómo te jode

Cómo te jode

Cómo te jode niña, que nuestra reina no sea noble,
pero que sea tan linda... te jode el doble, te jode el doble.

Te jode que una piba desprotegida un sueldito cobre.
Mucho más te jodería vivir un día como los pobres.

Insultás a cuatro vientos
y aunque a vos te va muy bien,
repetís el mismo cuento que bien envuelto te hicieron creer.

Me decís que soy violento,
que te tienen de rehén.
Pero si una charla intento en tono cordial, me puteás también.

Cómo te jode tía, que nuestra reina no sea noble,
pero que sea tan linda te jode el doble, te jode el doble.

Te jode su dialéctica y te revienta que siempre opina,
pero a mí no me mientas, te jode el triple que sea mina.

Si no ves lo que has mirado,
es que el odio te cegó.
El futuro está llamando, pero el pasado te ensordeció.

No se llega a ningún lado
caminando para atrás.
No te arrastres por el fango de los agravios que te hundís más.

Cómo te jode arpía, que nuestra reina no sea noble,
pero que sea tan linda te jode el doble, te jode el doble.

Te jode su sonrisa, que mueva el pelo y se lo acomode
y cuando te habla en serio y con propiedad, te recontrajode.

En tu marcha petitera
desafiante me gritás:
Zurdo, si este no es el pueblo, decime, el pueblo... en dónde está...

Yo te digo humildemente,
que mi pueblo está con voz.
Voz con zeta. Voz valiente contra el que miente, pero a favor
de que esté toda la gente,
cada cual con su color,
trabajando y yendo al frente para construir un país mejor.

8

Inmortal

Inmortal

Que me parta un rayo ahora mismo, que me pase encima un tractor,
que me empujen sin red al abismo, pero vos no me quites tu amor.

Que la reina y el rey de Inglaterra me contagien su rancio sudor,
que me trague mañana la tierra, que pasado me aplaste un temblor.

Pero vos no me quites tu estrella, la de arriba de la Osa Mayor,
la que guía mis horas más bellas, la que me ilumina en la noche peor.
Que se apague mi voz, pero vos no me quites tu amor.

Que el sicario más cruel de la maffia
me persiga por todo New York.
Que me ataque un rottweiler con rabia,
pero vos no me quites tu amor.

Que me pongan a arder en la hoguera,
con las letras de cada canción,
Que una bala perdida me hiera
justo al centro de este corazón.

Pero vos no me quites tu beso, que provoca mi resurrección,
que si no, cada vez que me muero, no puedo volver a encontrar la razón,
de querer levantarme de nuevo para otra función.

No hay sepultura para un inmortal, si un ideal lo sostiene.
Yo para algunos soy fruto del mal... Yerba mala nunca muere.

Que me lleven al juicio del inquisidor,
que me cuelguen sin lástima y sin defensor,
que me castigue Dios, pero vos no me quites tu amor.

Que me dejen cien horas despierto, adelante del televisor,
que me ahogue de sed el desierto, pero vos no me quites tu amor.

Que me hierba el agujero de ozono,
que Menguele me lleve al doctor,
que me de navajazos un mono
y que Jack sea mi destripador.

Pero vos no me quites tu risa, tu caricia, tu respiración,
no me quites lo que me da vida después de este día de desilusión,
que la única vía de salida, sale en tu portón.

No hay sepultura para un inmortal si un ideal lo sostiene.
Yo para algunos soy fruto del mal... Yerba mala nunca muere.
Que me sienten enfrente de un torturador,
que me pongan atrás otro más, el mejor...
Que me peguen los dos, pero vos no me quites tu amor.

9

Monólogo "Domingo Ferreiro"

Monólogo "Domingo Ferreiro"

Toca la gaita Domingo Ferreiro
toca la gaita... «¡Non queiro, non queiro!»

Porque están llenas de sangre las rías,
porque no quiero, no quiero, no quiero.

Y se secaron los ramos floridos
que ella traía en la falda del viento,
que ella traía a su novio soldado
o pescador, labrador, marinero.

Sobre Galicia ha caído la peste,
ay, los oscuros sargentos vinieron.
Están colgando en los pinos los hombres,
toca la gaita, no quiero, no quiero.

Nuestros hermanos que están allá abajo
pronto vendrán a vengar a los muertos,
pronto vendrán en mitad del verano,
pronto vendrán en mitad del invierno.

El que no ha muerto andará por el monte
y en las aldeas cayeron los buenos.
Ay, que no vayan los lobos al monte,
toca la gaita, no quiero, no quiero.

Ya llegarán las valientes milicias
para acabar con la hez del desierto.
Ya llegarán en mitad de la Historia,
ya llegarán en mitad de los tiempos.

Toca la gaita... ¡que baile el obispo!
Toca la gaita, no quiero, no quiero.
Porque no es hora de fiesta en España,
porque no quiero, no quiero, no quiero.

Ya llegarán los soldados leales
para acabar con los pájaros negros,
ya llegarán en mitad de la Biblia,
ya llegarán en mitad de los muertos.

Toca la gaita. ¡Que baile la víbora!
Toca la gaita, no quiero, no quiero.

Porque la gaita no quiere que toque.
Porque se ha muerto Domingo Ferreiro.

10

Soneto para los artistas

Soneto para los artistas

Los artistas deben ser, dicen algunos,
transmisores de alegría y sentimientos
y no tienen que opinar en el momento
que ellos mismos consideren oportuno.

Que le escriban poesías a su amada,
que le pinten a los reyes y al paisaje,
que se cubran con sus majestuosos trajes
y de nuestra realidad, no digan nada.

Los cantantes que le canten a los mares,
a los cielos y al brillar de las estrellas.
Que no vengan a pisar en los lugares
en que nadie les pidió dejar su huella.

El silencio es el mejor de los cantares
para el burro que patea y atropella.

Los artistas, deben ser, dice el sistema,
apolíticos, anárquicos y locos,
para entretener a muchos, mientras pocos,
solucionan los auténticos problemas.

Los artistas al cincel o al escenario,
a los lienzos y a los ruedos asombrosos.
Mientras tanto que el pincel del poderoso
pinte el tono de la tapa de los diarios.

Los actores que limiten su argumento
al libreto que ha marcado la comedia,
que se cuenten sus ideas en secreto
y no vayan a meterse en cosas serias...

Que sino, conocerán el guión perfecto,
de sus vidas convertidas en tragedia.

Yo prefiero que un artista verdadero,
sea espejo de su pueblo en cada escena,
que lo abrace y dance con los tiempos buenos
y se embarre en los pantanos de sus penas.

Que se aguante oír algún aplauso menos
antes de besar los piés de su Mecenas.

11

Con mi plata

Con mi plata

Por la culpa del gobierno hay una auténtica legión
de haraganes que mantengo con mi plata.
Hospitales donde nunca tengo que atenderme yo,
injustamente se sostienen con mi plata.

Intendente, diputado, concejal y senador.
Esa inútil gente vive con mi plata.
El docente, el jubilado, el abogado defensor,
y sus parientes comen todos con mi plata.

Con mi plata las mujeres pobres, tienen un colchón
donde sus bajas pasiones se desatan
y conciben siete hijos gracias a la asignación
que los viste y alimenta con mi plata.

Con mi plata hay que bancarle su futura educación,
mientras yo mando a mi hijo a una privada,
que el estado ha subsidiado en excelente decisión
así no doy la cuota entera con mi plata.

Por la culpa del destino, del Pingüino y de Perón
hay millones que festejan con mi plata,
despilfarran en los actos para la inauguración
de otra fábrica que hicieron con mi plata.

De otra cuadra con asfalto y con más iluminación,
con viviendas que construyen con mi plata,
prohibiendo autoritariamente toda importación
de lo que quiero comprarme con mi plata.

Con mi plata el colectivo goza de alta subvención
y me hago el distraído con la nafta
porque es una prioridad mi auto sobre el peatón
que seguro algo cobra con mi plata.

Con mi plata quiero un dólar de menor cotización
que me haga la estadía más barata
en Miami, donde ahora estoy cantando esta canción,
porque acá hay más libertad y no te matan

Y el gobierno es bueno y nunca te maltrata
y da gusto que se queden con mi plata.

12

El niño Mauricio

El niño Mauricio

El niño Mauricio me está molestando,
me tira del pelo y me grita
y si le contesto se escapa llorando, a contárselo a la señorita.
El niño Mauricio de lengua afilada,
me carga y me llama gallina
y se pasa el tiempo haciendo gansadas, más grandes que su limusina.
Se sube en un banco y en cada recreo promete que pronto será el gran campeón.
El niño Mauricio promete y no veo nada de lo que prometió.
El niño Mauricio no quiere juguetes
de juguetería barata...
Con diario y palitos yo armé un barrilete
y a él se lo armaron con plata.
Lo visten, lo peinan, le hacen los deberes,
para que juegue a la pelota,
pero en nuestro equipo ninguno lo quiere, porque él juega siempre con botas.
El niño Mauricio ya está amonestado
por ir espiando a cada profesor.
Ayer al peor compañero votamos.
Y el niño Mauricio ganó.
Toca la flauta el niño Bartolo,
yo toco un solo en mi viola española,
gira después la batuta de Alfonso
y ahí viene Mauri con cara de zonzo
golpeando una cacerola.
El niño Mauricio está lleno de guita
y tiene la cara tan dura
que sale a mangar lo que no necesita, para acumular más basura.
Por la bicisenda lo vi piropeando,
el ¨dandy¨ se siente muy potro.
Y es cierto, de bosta nos vive llenando y siempre la culpa es del otro.
El niño Mauricio ha tapado los caños y toda la escuela se nos inundó.
Si habías pensado, qué horrible es el baño ... El niño Mauricio es peor.
Toca la flauta el niño Bartolo....................

Qué bien que suenan hoy todas las voces
no como entonces, que había tan pocas.
Pero Mauricio muy bien no se oye
porque cuando habla el tilingo está en pose,
con una papa en la boca.
Y un billetín de su máximo prócer… Don Julio Argentino Roca.

13

Dicen que dice la gente

Dicen que dice la gente

Dicen que dice la gente
que este país no es normal.
Dicen que dicen que enfrente
todo es excelente y acá es todo mal.

Dicen que dice la gente
que el odio debe parar,
golpeando a los diferentes
o directamente tirando a matar.

Si esa es la gente decente
yo debo ser los demás...
Los demasiado inocentes
que te hablan de frente y no empujan de atrás.

Dicen que dice la gente
que el tiempo que ya pasó
siempre es mejor que el que viene
y si hoy truena y llueve, mañana es peor.

Dicen que dice la gente
que se debe conservar
conservadora decencia
y pacatas creencias al discriminar.

Si eso es ser del occidente
yo debo ser oriental,
pero lamentablemente
no es Punta del Este mi ciudad natal.

Dicen que dice la gente
que hay gente bien y otros más.
Otros que no se parecen,
y no se merecen ni estudio ni paz.

Dicen que dice la gente
que entonces quiere cambiar
ya mismo y de forma urgente
a los dirigentes que ayer fue a votar

Dicen que dice la gente
que este país no es normal.
Gente que adora al que miente
y es televidente del mismo canal.

14

No voy a cambiar

No voy a cambiar

Puedo haber pasado de moda,
puede ser que nadie quiera escuchar
lo que sale de mi boca,
de mi bronca o desde el centro de mi alma.

Puede ser cualquiera la historia,
puede ser que el próximo recital,
tenga gente haciendo cola
o esté sola mi familia en la sala.

Aunque cambie el tiempo no voy a cambiar,
mientras tenga aliento seguiré dando batalla.
Aunque lo que siento, a veces pienso,
nadie lo quiere escuchar...
No voy a cambiar ni una palabra.

Aunque cambie el tiempo no voy a cambiar,
no voy a cantarle al diblo himnos y alabanzas...
Aunque sople el viemnto en contra y deje
la esperanza siempre atrás,
yo no voy a andar pidiendo palmas.

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